sábado, 21 de octubre de 2017

Boicot y silencio empresarial



El sector de la moda es uno de los más sensibles, dada la elevada competencia entre firmas y el gran número de alternativas para los ciudadanos. Compañías catalanas como Mango, Desigual y Custo Barcelona no quieren posicionarse sobre "cuestiones políticas", el miedo es libre y aquí prima el estarse calladito para no llamar la atención y que no se note.

Tampoco quieren pronunciarse desde la multinacional suiza de alimentación Nestlé, con sede española en Esplugues de Llobregat (Barcelona) y diez fábricas en cinco comunidades autónomas.

Danone, nacida en Barcelona en 1919  tiene plantas de producción en Madrid, Barcelona, Asturias y Valencia, así como cuatro plantas embotelladoras de agua en Girona, Guadalajara y Granada, ni palabra.

La alemana Henkel, que cuenta con reconocidas marcas de adhesivos, productos capilares y artículos de limpieza y tiene en Barcelona la sede de Henkel Ibérica, también descarta hacer declaraciones.

Unilever, que vende desde helados a desodorantes, pasando por sopas, jabones, mayonesas, pastas de dientes e infusiones. Está en el mercado español desde 1948. Silencio absoluto.

La germana Mediamarkt -con sede española en Barcelona- comunica que no se posiciona en cuestiones "políticas o geográficas", aunque declara que "MediaMarkt necesita un entorno político estable que permita seguir invirtiendo para generar crecimiento y empleo. Cualquier inestabilidad afecta directamente al consumo, no sólo en Cataluña, sino también en España".

El grupo Damm también opta por el mutis. Y así podríamos seguir, estos son grandes nombres pero imagínense ustedes la de pymes que se encuentran entre la espada y la pared ante esta situación, porque el mercado español, no solo el catalán, es su principal mercado de ventas. Luego están todas aquellas empresas que no hacen declaraciones pero que lo dicen todo con sus actos, como las cientos de empresas que han cambiado su sede social desde Cataluña a otras regiones de España en estos últimos días. Desde la cúpula independentista se lanzaba públicamente el mensaje de que esas fugas empresariales no tenían la menor relevancia, pero  después de que Banco Sabadell y CaixaBank anunciasen el traslado de su sede fuera de Cataluña para tranquilizar a sus clientes y a los mercados, la CUP llamó a los catalanes a retirar sus ahorros de dichas entidades como muestra de rechazo y a buscar otras "alternativas financieras". Una vez más, hacen gala de la mentira y la hipocresía para conseguir su objetivo independentista, sin importarles lo más mínimo el daño que su inviable proyecto tiene y tendrá sobre el bolsillo y la economía de todos los españoles, los catalanes los primeros. Lo triste es que el gobierno central le sigue el juego, mira para otro lado y sigue dando plazos a ver si el alumno díscolo vuelve algún día a la “normalidad”.

Boicot? Nadie quiere hablar de ello, pero está claro que es una forma que tiene la ciudadanía para protestar y tomarse la justicia por su mano cuando siente que los poderes públicos lo dejan indefenso ante un flagrante incumplimiento de la ley por parte de unos y de dejación en la defensa de la legislación vigente por parte de otros.

miércoles, 18 de octubre de 2017

La factura catalana



Ahí van unos datos más que elocuentes sobre el hecho de que la pantomima catalana no nos va a salir barata, sus implicaciones se prolongarán además en el tiempo:

-El conjunto de los habitantes de España, incluidos los de Cataluña, perderán más de 3.300 millones de euros. La cifra la reconoce el propio Gobierno, que el lunes por la noche envió a Bruselas el Plan Presupuestario de 2018 y modificó a la baja el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) para el próximo año. En concreto, la previsión se reduce del 2,6% previsto antes del órdago independentista al 2,3% actual, lo que supone una caída de tres décimas y una factura de esos más de 3.300 millones.

-La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y Exceltur rebajan la previsión de crecimiento para este año al 3% [desde el 3,2% que había pronosticado], y la patronal del turismo afirmó que, desde la celebración del referéndum el pasado 1 de octubre, Cataluña ha perdido ya un 15% de su actividad turística, toma bocado. Si la situación no se reconduce, el crecimiento proyectado para el conjunto del sector en 2017 podría sufrir un recorte del 25%. Sin el factor catalán, el turismo crecería este año un 4,1%, según la previsión recogida en la encuesta de Perspectivas Turísticas. Sin embargo, el organismo considera probable que se produzca una caída del 20% de la actividad turística en Cataluña en los tres meses que restan del año.

-Cataluña dejaría de ingresar 1.197 millones de euros en el cuarto trimestre, de los 5.987 millones que habitualmente genera el turismo en el último trimestre del año. El turismo, según datos de la Generalitat anteriores a la consulta, supone un 11% del PIB de Cataluña, es decir, alrededor de 25.000 millones de euros.

-Un total de 700 empresas han trasladado su sede social desde Cataluña a otras regiones de España desde el pasado 2 de octubre y hasta el pasado día 16. En dicho período las operaciones de aumento de capital en Cataluña han bajado un 12,2%, mientras que en el conjunto de España la disminución fue del 1,7%, aunque el importe que se desembolsó en dichos aumentos en el tercer trimestre bajó un 1,5%, mientras que en el resto de España ha subido un 107%. Curiosa correlación...

-Barcelona sería una de las principales damnificadas a nivel económico. Según datos de BNP Paribas Real Estate, la contratación de superficie logística en la capital catalana en el tercer trimestre alcanzó los 77.100 metros cuadrados un 31% menos si se compara con el trimestre anterior y casi el 50% menos en relación al mismo periodo de 2016.

-La agencia de calificación Moody's ha intensificado en las últimas semanas sus advertencias sobre las implicaciones del proceso soberanista en la economía española. Este viernes 20 de octubre tiene previsto hacer pública su revisión sobre la calificación crediticia de España y este martes, cuando faltan apenas tres días para ese momento, la firma advierte de que si la tensión catalana se prolonga en el tiempo y acaba enquistándose, podría perjudicar a la baja la calificación de la deuda soberana. Lo que consecuentemente tendrá un efecto sobre el coste de la deuda, si vendes algo que es de menos calidad te lo pagarán peor, lo que traducido en términos de deuda significa que para colocar tus títulos de deuda pública tendrás que pagar intereses más altos. Por supuesto, la deuda catalana ya casi se sitúa en estos momentos al nivel de los billetes del monopoly, es decir, ni dios quiere tener títulos catalanes o de la ciudad condal, por ejemplo, porque el riesgo de impago que acarrean es brutal. Es decir, el independentismo, por muchos videos que publiquen manipulando la realidad y por muchas declaraciones que haga la fregona y sus acólitos situándose como víctimas del soberanismo español, no ofrece ninguna confianza desde el punto de vista económico, ya sin entrar en ideologías ni derechos democráticos que se pasan por el forro.

Son datos más que elocuentes, grandes cifras, sin entrar en la microeconomía, que también tendría lo suyo que decir (léase empresas y familias catalanas), de lo que nos está costando y lo que nos costará la factura del indepentismo catalán a todos los españoles, incluidos los que viven en Cataluña. Porque a veces cuando uno oye hablar a los políticos tiene la sensación de que cuando hablan del coste económico del proces lo hacen como si estuvieran hablando de un tercer país, no señores, esto es España, y la factura la pagamos todos, en términos de crecimiento económico y, en consecuencia, ahí viene lo peor, de empleo.

No olvidemos que estos son datos constatados o predicciones basadas en modelos bien asentados. Pero hay un dato que no recogen y es lo que los economistas llamamos el coste de oportunidad. Es decir, lo que estamos dejando de ganar o ingresar como consecuencia de toda esta situación, la inversión extranjera es el más claro ejemplo de ello. Mientras no se resuelva de manera clara y rotunda este golpe de estado encubierto la factura económica seguirá creciendo y creciendo, algo que parece que a los que gobiernan en Cataluña y en en el resto de España no les apremia demasiado, o incluso, como en el caso catalán, tienen los bemoles de desmentir esta realidad. Dimisiones/ceses en masa ya y artículo 155 al canto, pero ya, YA!

lunes, 16 de octubre de 2017

Arde Galicia



Cualquiera que tenga sentidos y sentimientos se habrá sentido en Galicia como si se le quebrase el alma este fin de semana, y lo que seguirá en los próximos días. Salías a la calle y veías el sol oculto tras una nube de cenizas, como un sol en declive sacado de Blade Runner, extinguiéndose la vida. Además, han muerto cuatro personas. Ya solo por eso esta situación es inaceptable.

Pero, mucho se habla de los culpables y poco se analizan las causas del problema. Causas que son muchas, complejas y variadas, pero que son determinantes y fundamentales para poder dar una solución, si es que tal cosa es posible, para siempre a esta lacra que, no lo olvidemos, nos viene asolando en Galicia, y no somos la única zona del mundo donde ocurre, desde hace decenas de años.

Creo que no se puede negar que gran porcentaje de los incendios han sido provocados, punto fundamental, pero ese dependerá de las investigaciones que lleven a cabo las autoridades competentes. Las condiciones eran ideales, sequí pertinaz, escasez de lluvias y de humedad, viento fuerte y el abrigo de la noche para los desalmados que por muchos y variados intereses se aprovechan de esas circunstancias para quemar lo que es de todos y amenzar la seguridad de muchos. Pero, es de pura lógica, no cabe en cabeza humana que de repente y al unísono casi se produzcan más de 100 incendios en nuestra comunidad. No me cabe duda, la mano del hombre está detrás de buena parte de esos incendios.

Creo que hay que disitinguir dos tipos de causas: coyunturales y estrucuturales. Sin duda, la clave del problema está en los aspectos estructurales. Causas coyunturales: la sequía de los últimos meses, las quemas para regenerar el pasto que dan lugares accidentes e incendios, cosa que ocurre también por ejemplo en Asturias.

Ahora bien, lo que está en el fondo del asunto son las causas estrutucturales:

-La actuación de la mano del hombre, que provoca por intereses espúreos, múltiples, los incendios. Una parte de esos intereses son económicos: los que queman por intereses personales para obtener un aprovechamiento de la tierra diferente al que tiene. La sospecha sobre el cuerpo de brigadistas contratados temporalmente y que recientemente han sido despedidos por la Xunta una vez pasada la supuesta temporada de incendios. La política de la Xunta es errónea al dotar de carácter temporal a estos cuerpos, pero eso no es justificante para que un pobre diablo que pierde su empleo le prenda fuego al monte por venganza o por hacer patente la necesidad de su puesto de trabajo, me ahorro los calificativos hacia personajes de esa calaña, por no ofender a nadia.

-El cambio climático, solo un imbécil puede negarlo. Y está para quedarse, los que vivimos en Galicia somos muy conscientes de esto porque el cambio ha sido brutal en los últimos años. Como consecuencia, el riesgo de incendios será cada vez mayor.

-L Ley de Montes que permite la recalificación de terrenos quemados para fines urbanísticos, es decir, la zanahoria para el pirómano.

-Las  sustitución de especies autócotonas, más resistentes al fuego, por otras especies ajenas a nuestro habitat, especialmente los eucaliptos. De nuevo, los intereses económicos están detrás de esta lamentable práctica que lleva décadas produciéndose en Galicia. El eucalipto crece más rápido, y chupa agua de manera insaciable, y por tanto es mucho más productivo que las especies autóctonas.

-Y por último, y para mi el punto más importante, la Educación. Equiparo la gravedad de un problema como el terrorismo ecológico, como el de los pirómanos, con otro gravísimo problema de nuestra sociedad como es la violencia machista. Ponerle coto una vez que el problema ya está en marcha es harto complicado, por lo que la solución ideal es la prevención, y la prevención pasa únicamente por educar y hacer consciente a la gente del valor de la Naturelaza, la vida y el respecto a los demás. En eso, como en otras cosas, en Galicia y en España tenemos un enorme déficit y atraso cultural y educativo respecto a otros países del mundo, y de Europa sin irnos más lejos. Es lo más complicado de cambiar, sí, pero es la mejor herramienta contra el fuego y la miseria y el dolor que de ello se deriva a largo plazo. Invirtamos en educación y no solo en medios materiales de prevención.

Por últumo, dar solución este fin de semana a una situación desbordante como la que se ha producido era casi imposible para este gobierno o para cualquier otro, pero como he dicho, las cosas suceden porque hay unas causas y si no tomas las medidas oportunas a lo largo del tiempo eres responsable en cierta medida de la locura y de los actos que de ella se derivan de unos cuantos hijos de puta que le prenden fuego a nuestros bosques. Pero aquí no va a dimitir nadie, esto es España. Por lo menos, que traten de implementar soluciones al origen de los problemas. El futuro del planeta es negro, el de la humanidad también y hay días que te parece que todo esto no tiene ningún sentido, este fin de semana pasado fue uno de esos.

lunes, 9 de octubre de 2017

Poca broma



Lo que no ha conseguido Rajoy (básicamente porque ni lo ha intentado, fiel a su costumbre de escoder la cabeza debanjo del ala) ni el gobierno de la nación, lo están consiguiendo el pueblo español que sale a la calle a mostrar su unidad y sobre todo, el miedo es libre y no hay nada que asuste más que te toquen el bolsillo, la deriva económica o el cariz que está tomando el tema desde el punto de vista empresarial y económico en Cataluña.

Cito al Economista: “La pérdida de empresas es una larga anemia de la economía catalana. Desde 2008 (primera fecha en la que Axesor ofrece datos), la pérdida de empresas ha sido continuada y, en términos netos, se han ido casi 2.200 más de las que han llegado. Además, anualmente, desde 2008, Cataluña ha visto a más empresas partir que llegar de otras comunidades. En términos absolutos, los peores años fueron 2013 y 2014.
El año pasado, el número de empresas que se fue de Cataluña casi dobló la cifra de las que atrajo desde otros lugares de España (se perdieron 987 empresas frente a las 504 que llegaron). En 2013, se fueron 987 y sólo llegaron 504.
Los últimos datos disponibles (correspondientes al 15 de noviembre) también adelantan un mal año. Hasta entonces, habían abandona Cataluña casi 700 empresas, una cifra que casi dobla el número de las que se han asentado en la región.”

Como vemos no es un proceso que se haya iniciado ahora, pero sí que ha hecho mucho más notorio y palpable en estos últimos días previos a la supuesta declaración de independencia unilateral, pues ha ocurrido que grandes grupos empresariales han emigrado su sede social desde Cataluña a otras regiones del país, cuando grandes empresas del Ibex35 como Banco Sabadell, La Caixa o Gas Natural se van es que algo gordo está pasando dentro del empresariado catalán. Se sienten más españoles ahora que antes? Lo dudo, pero lo que sienten es que el riesgo y la inseguridad jurídica no les sienta nada bien a sus negocios. Las implicaciones a corto plazo de estos cambios de sede se pueden considerar más de marketing y de tipo social que económico, pero si se mantienen a largo plazo la posibilidad de desplazamiento de inversiones desde Cataluña a otras partes del país crece, y con ello la traslación de puestos de trabajo. Por supuesto, sólo a un descerebrado como el presidente catalán le podría sar igual esta situación.

A eso súmenle el posible boicot a empresas y productos catalanes por parte de los consumidores españolas y se pueden imaginar que el grado de histeria de los empresarios catalanes se empieza a disparar, por no hablar de la preocupación creciente de miles y miles de trabajadores. Dicho esto, veremos que pasa mañana y pasado, y pasado pasado...