martes, 20 de febrero de 2018

El kit de reparación demográfico



Libertad Digital entrevista a Alejandro Macarró, especialista en fenómenos demográficos, que acaba de publicar su libro "Suicidio demográfico en Occidente y medio mundo. ¿A la catástrofe por la baja natalidad?".  Todos somos conscientes del problema grave de envejecimiento poblacional que acecha a Europa y en particular a España y más en particular a Galicia, una de las regiones de más declive demográfico de todo el continente. Envejecer con salud es bueno, sobre todo si uno tiene una renta garantizada para sus últimos años de existencia y si tiene unas coberturas de servicios básicos también garantizados, sobre todo sanitarios. Por desgracia, el envejecimiento progresivo que está sufriendo nuestra sociedad va justo en contra de esos dos elementos. Ya sabemos el problema de financiación que vive el sistema de pensiones y que no hará sino complicarse de continuar esta tendencia. Lo mismo ocurre con el sistema universal sanitario, pues al final los recursos salen todos del mismo pozo que es la actividad económica, es decir, salarios y beneficios, que son los que pagan impuestos.

La gran pregunta es: ¿se puede revertir esta situación de declive demográfico? O mejor dicho, se puede revertir de manera consistente? Aquí estamos hablando de tendencias a largo plazo, así que de nada valdría que un año de cada 50 saliese un saldo positivo, cosa de todas formas bastante improbable también. Ahí es donde retomo la parte que me parece más interesante de la citada entrevista, estos son los mecanismos que esgrime Alejandro Macarró para intentar el descalabro total de nuestra población, o por lo menos algunos que se podrían poner en marcha:

  -  Concienciación sobre el problema y el desastre al que aboca a nuestra sociedad, lo bonito que es tener niños y lo triste que suele ser no tenerlos: a la sociedad en general, a las élites políticas y no políticas, a quienes están en edad fértil, y a los escolares.

   - Prestigiar la maternidad/paternidad y la familia, sin estigmatizar a las madres tradicionales, y sin ningunear la figura del padre.

-   Estudiar bien el problema, sus consecuencias, sus causas y sus posibles soluciones, con profundidad, rigor y sin sesgos ideológicos/partidistas.

 -   Compensar económicamente a los padres por tener hijos (deducciones en IRPF y SS, extra en pensiones, IVA pañales, etc.), con énfasis en la madre, pero no solo en ella.

-   Descargar a las empresas de todos los costes por maternidad / paternidad.

-   Fomentar, facilitar y prestigiar la nupcialidad y la estabilidad familiar.

-   Fomentar y facilitar que tengamos antes en la vida el primer hijo y siguientes.

-   No pagar la contracepción con dinero público, algo absurdo en un país que necesita más niños, y facilitar al máximo que se puedan dar en adopción los bebés no deseados.

-   Identificar y remover las trabas y desincentivos directos o indirectos a la paternidad, que hay por doquier, con cambios en las leyes correspondientes.

-   Facilitar en lo que se pueda la vida a los padres (por ejemplo, en horarios…).

-   Y muy importante: involucrar a la sociedad civil. Esto no es solo problema de "políticas" y de "políticos".”

Ciertamente, el problema es complejo y requiere la actuación en diversas esferas, no sólo la económica. Pero quizás sea en el estilo de vida donde se antoja más complejo y decisivo actuar si se quiere alcanzar una solución. Estamos acostumbrados a que nos vendan por todos lados que hay que vivir la vida, que hay que hacer mil cosas, viajar, comprar coches, casas, ocio… y sin embargo, todo ese capitalismo rampante y campante parece que no casa muy bien con el hecho de tener hijos, o al menos coacciona de manera parcial la libertad y los medios para vivir esa vida de “consumo pleno” que tanto nos han metido por los ojos, valga la expresión capitalista. Luego están los que por convicción no quieren saber nada de niños, pero acaso sabemos cuántos de ellos son? O acaso, cabe también preguntarse, haya que empezar a enseñar a los futuros mayores, desde niños, que tener hijos ya no es solo una opción personal sino una obligación social? Porque eso es lo que parce desprenderse de algunas de las opciones que plantea el señor Macarró.

En definitiva, no estamos hablando sólo de recursos económicos sino también de valores, de decisiones personales, de ideologías, de formas de ver y entender la vida y todo ello a nivel global, de un dilema moral. Y entonces, la gran pregunta que me surge es: es legítimo que cualquier gobierno trate de manipular la voluntad, las mentes y las decisiones de sus ciudadanos para conseguir lo que parece un bien común? O por el contrario estamos cayendo en lo que ahora se llama adoctrinamiento y que parece estar tan de moda? Con el tiempo a todo se acostumbra uno y después de 20 ó 30 años lavándonos el cerebro acerca de la necesidad de tener niños es posible que nos pareciese una cosa de lo más normal, pero a día de hoy, la disyuntiva entre dejar que la sociedad discurra por los cauces que ella espontáneamente impone y dejar que una élite política o cívica marque las pautas de nuestra forma de vivir no me parece nada clara, salvo que uno se ciña exclusivamente al problema de la sostenibilidad económica del sistema.
Y lo que sí parece claro es que una política de natalidad basada sólo en incentivos económicos no es la solución al problema, porque es algo mucho más grande que sólo unas desgravaciones fiscales, unas cuotas a la seguridad social o, la nada despreciable tarea, de lograr unos salarios dignos, por no hablar de pleno empleo. Cómo dice el autor del libro, es “bonito tener niños y triste no tenerlos”? Bueno, esa es su visión particular, pero estoy seguro de que mucha gente no piensa de esa forma, ergo habría que lavarles el cerebro a base de campañas de natalidad? El debate está servido.

martes, 13 de febrero de 2018

Amazon: gigante con pies de atleta



Amazon despedirá a cientos de empleados de su sede central en Seattle y otros tantos  del resto de sus operaciones globales. Los despidos ya se han iniciado y se centran principalmente en el negocio de consumo minorista, que incluye juguetes, libros y productos comestibles. La idea, según la cadena CNBC, es asignar los puestos vacantes a las empresas del grupo que más crecimiento están experimentando, como Alexa o el área de entretenimiento.

La fuerza de trabajo global de Amazon se situó en 566.000 personas en diciembre, según los últimos datos actualizados por la propia compañía y que aparecen en el documento de presentación de sus cuentas trimestrales, lo que supone un 66% más respecto al número de empleados de un año antes. Los despidos han sorprendido a muchas personas, atendiendo al rápido crecimiento que está experimentando la empresa. Sólo el año pasado creó 130.000 puestos de trabajo, sin contar con los casi 90.000 que le supuso la adquisición de Whole Foods. "Para los empleados afectados, trabajamos para encontrar funciones en las áreas donde estamos contratando", aseguró un portavoz de Amazon a CNBC.

La trayectoria de Amazon sigue marcando hitos a nivel empresarial y sin duda es y será objeto de análisis en las escuelas de negocio alrededor del planeta. No es para menos. A su ya proverbial eficacia en el tema logístico, algo que comparte con otras compañías punteras a nivel mundial, como es el caso de Inditex, se une una gran agilidad y dinamismo a la hora de analizar la realidad empresarial y tomar decisiones rápidas y muchas veces drásticas, pero a la postre acertadas, en su mayoría al menos, lo que hace que alcance un equilibrio en la gestión empresarial que se mueve entre la capacidad y medios de una empresa multinacional y la facilidad de adaptación de una pyme.

Solo así se puede entender el enorme crecimiento que este gran grupo está teniendo en los últimos años, realmente desde sus orígenes, y que parece seguir un ritmo exponencial. Su diversificación exitosa del negocio, abarcando cada vez más sectores, queda en evidencia con la preocupación de líderes o empresas punteras en los diversos sectores como H&M y otros grandes retailers o las empresas de la distribución alimentaria como Mercadona, Carrefour, etc. Las últimas noticias apuntaban a que Amazon está decidida a entrar en el negocio de la distribución alimentaria, en ello están tratando de vencer el principal obstáculo que es la comercialización de productos frescos. Su gestión de los recursos humanos, con constantes despidos y contrataciones, es la única forma de atender a esa política expansiva, y pone además de relieve lo que será cada vez más una constante en los próximos años, incluso en países tan proteccionistas con el mercado laboral como España. Adaptarse o irse a un templo nepalí, es lo que nos queda.

lunes, 12 de febrero de 2018

Detrás de Superlópez



Superlopez cumple más de cuarenta años y  El Mundo le hace una entrevista al autor de este entrañable comic, y entonces es cuando te das cuenta que hay alguien detrás del personaje de Superlopez, su creador. Hasta ahora nunca me había parado si quiera a pensar en ello, también soy bastante despistado, lo reconozco.

La entrevista me ha llamado la atención sobre todo por la desgana, o desengaño o llámelo usted como quiera, con que se expresa el autor sobre su criatura y sobre el mundo del comic en general, algo que seguramente sorprenderá a todos aquellos grandes coleccionistas de comics, que incluso consideran estos casi como un arte.

También hay declaraciones referentes al tema independentista, cómo no podía ser de otra forma, pero eso ya no me importa, cada uno tendrá su ideología o su forma de pensar y no voy a entrar en ese tema. En todo caso una entrevista que da para la reflexión y un punto a favor de su autor es la evolución de a la hora de reflejar los aspectos cambiantes de la sociedad y que haya decidido envejecer al personaje con el transcurso del tiempo, quien sabe si por ese pesimismo endémico que parece reflejar su autor o por inspiración del momento, el caso es que me parece un gran acierto. Claramente me quedo con la personalidad de Superlopez antes que la depresiva de su autor. Este es un extracto de la entervista:

¿Qué sensaciones le provoca tanto acontecimiento?

    Ninguna en especial. Los aniversarios nunca me han motivado. Sólo me preocupa el trabajo que estoy haciendo ahora. Una historia de Superlópez me lleva cuatro meses y no estoy para vanidades inútiles. La película no tiene nada que ver conmigo. Creo que [el director] Javier Ruiz Caldera y los suyos lo harán bien, pero no es mi terreno.

Su personaje nació como parodia de Superman, creció encarnando al español medio, con sus frustraciones de oficinista y deseos de aventura, y maduró hasta convertirse en algo así como un activista que señala conflictos sociales: el consumo de drogas, la explotación infantil, los desahucios... ¿Está satisfecho con la evolución?

    Sí, nunca he creído que mi trabajo consista en hacer lo que me piden los lectores, que por otro lado es la misma idea que alimenta la telebasura. Además, me habría aburrido mortalmente haciendo siempre lo mismo. Creo en lo que hago y hago lo que creo, mientras me dejen. Tengo incluso derecho al fracaso. El público también ha evolucionado. Los que me leían al principio hoy tienen 40 años, más o menos. Ese público puede que no esté contento con lo que hago ahora, pero los tiempos actuales no tienen nada que ver con los años 80 o 90.

Admite que la fuente de inspiración de sus historietas fantástico-costumbristas son sobre todo los periódicos y los informativos de televisión. ¿Le entran ganas de dejar de dibujar al ver el estado de las cosas?

    ¡Al revés! Tengo bastante vocación docente. Me dirijo a lectores de 12 a 18 años y me interesa mucho hacer reflexionar a los muchachos de ese rango de edad, aportarles algo positivo, fomentar su criterio propio.



Aunque conserva sus poderes, su superhéroe ha sufrido el paso del tiempo y ya peina canas. ¿Por qué decidió envejecerlo, a diferencia de otros ilustres del tebeo autóctono que presentan una edad invariable?

    Porque me ciño a la realidad. La época de las grandes hombreras pasó, la de los pantalones campana también... Como no podía modernizar la indumentaria de López, he ido incorporando personajes jóvenes en cada época.

¿Qué futuro le espera a Superlópez en un mundo en el que prácticamente ya no hay cabinas telefónicas y donde van perdiéndose los lectores de papel?

     Cada vez uso menos la cabina... Lo que es evidente es que, sin lectores, Superlópez desaparecerá. Si eso sucede, no lloraré por él. Mis personajes son sólo un medio para contar mis historias. Tanto me sirve uno que otro.

 ¿Cree que las viñetas pueden competir con el entretenimiento digital al que ahora tienen acceso los jóvenes?

     A la vista está que no.

 ¿Qué se pierde un niño que no lee tebeos?

    Nada. Lo importante es que lea, y mejor si son libros. Ahora hay imágenes hasta en la sopa. Los tebeos no son indispensables, y cada vez más devienen en objeto de lujo.

¿Le gustaría que otro autor continuase su trabajo en el futuro, como ha sucedido con Astérix y Corto Maltés?

     No me importa, no estaré para verlo. Además, esas continuaciones responden a intereses comerciales. Creo que el espíritu de un personaje se diluye cuando pasa de un autor a otro

jueves, 8 de febrero de 2018

Datos del Cis



Se acaba de publicar la última encuesta del CIS respecto a la intención de voto de los ciudadanos. La encuesta se ha realizado con datos hace unas semanas en el mes de enero, dato siempre importante a tener en cuenta, porque las cosas pueden fluctuar de manera significativa dependiendo de la coyuntura de cada momento. Si nieva o no nieva, si el de la fregona vuelve o no vuelve camuflado en los bajos de un camión o si se alquila una mansión en algún pueblo de ese amago de país democrático que es Bélgica, si los podemitas tienen o no alguna de sus geniales ocurrencias, si los socialistas hacen alguna genial propuesta de cartónpiedra para salvar el sistema de pensiones, etc etc.

Los resultados que arrojan los estudios del CIS son los que más o menos se llevan menejando desde que se celebraron las últimas elecciones catalanas, es decir:  Ciudadanos sube desde las elecciones del 26-J, ha escalado 7,7 puntos y cuenta ya con una estimación de voto del 20,7%. La formación naranja arrebata así la tercera posición en el espectro político a Unidos Podemos y se sitúa a 5,6 puntos del PP y a sólo 2,4 del PSOE. El PP sigue siendo la primera opción de voto con una previsión de voto del 26,3% pero se siguen dejando votos a cada mes que pasa, ha perdido desde el 26-J siete puntos, prácticamente los mismos que se ha anotado el partido de Albert Rivera. El PSOE más o menos se mantiene y Podemos pierde puntos respecto a las elecciones del 26-J pero menos de lo que pronosticaban las encuestas de los medios de comunicación del mes pasado tras el esperpento independentista.

Hasta aquí todo según lo previsto teniendo en cuenta la materia prima política con la que contamos. Lo sorprendente es la reacción de todos los implicados ante la publicación de estos datos, ya que todos ellos se han felicitado por la buena marcha de sus respectivos grupos políticos. Viene a ser algo así como el misterio de la multiplicación de los panes y los peces, aquí hay votos para todos no se preocupen que a ninguno le ha de faltar. El PP se felicita porque sigue siendo la primera opción de voto, aunque no pierde ocasión de lanzar dardos envenenados contra su mayor adversario a día de hoy, la formación naranjito. El PSOE se congratula porque desde la confirmación de Sánchez han recuperado terreno aunque sus propuestas ambiguas y sus dilemas internos sigan pesando como una losa. Los podemitas se muestran felices porque a pesar de todas las burradas, chorradas y juicios de escaso índole democrática que sueltan con tanta ligereza cada día, y a pesar de sus guerras civiles internas también, el resultado es mejor que el que auguraban los resultados de los últimos comicios catalanes, la verdad es que razón no les falta, para ser un partido oportunista les va bastante bien. Lo mismo que le pasa a Ciudadanos, estos al menos se muestran un poco cautos por las encuestas, aunque felices, y ciertamente son los que tienen más motivos para estar contentos, aunque su buen resultado sea más demérito de sus adversarios que mérito de sus propuestas, también bastante ambiguas e influenciadas por la fuerza del viento y de los elementos de la vida diaria.

En conclusión, los políticos españoles siguen a lo suyo, que es negar la realidad que ven los ciudadanos y evitar mojarse demasiado, siempre menos que el contrario porque el que más seco sale es el que gana. No importa lo que suceda en este país siempre hay motivos para el optimismo y el buen rollito entre los políticos, lástima que cuando sales a la calle no suceda lo mismo. Nada, que viven en su realidad paralela, al menos hasta las próximas elecciones, donde algunos se caerán de la burra y otros quizás se lleven la sorpresa de sus vidas. Por eso podemos ver que enemigos que antes eran irreconciliables ahora se sientar a negociar juntos, como el caso de Podemos y Ciudadanos con motivo de la ley electoral que quieren cambiar, con toda razón por otra parte. Y en la otra orilla pasa lo mismo, del “no es no” a apoyar el gobierno cuando me convenga. Por supuesto, los nacionalistas ya son punto y aparte, viven en su propio universo, pero unos arruinados, como los catalanes y otros enriqueciéndose a costa del resto de los españoles, como los vascos, y aún así claman por más derechos y más independencia. Normal que la financiación esté como está y que haya más una comunidad autónoma en pie de guerra y deseando romper la baraja. Tonto el último, y que le den al ciudadano de a pie.

jueves, 1 de febrero de 2018

Niveles de democracia



La prestigiosa revista The Economist ha publicado un interesante estudio en el que evalúa el estado de salud democrática de los distintos Estados alrededor del mundo. Se basa en cinco puntos:

1.Los procesos electorales y el grado de pluralismo del sistema de partidos
2. El funcionamiento del gobierno y las administraciones.
3.La participación ciudadana en política.
4.La cultura democrática de cada país.
5.Y por último el grado de libertades civiles y personales.

Pues bien, evaluando estos cinco apartados se obtienen resultados interesantes y significativos como que Noruega es la mejor democracia del mundo, con una nota de 9,87 puntos, Islandia es segunda, con 9,58 puntos, y Suecia es tercera, con 9,39 puntos. Además, la publicación considera como “democracia plena” aquellos países que obtienen una puntuación superior a 8. Y ahí saltan las sorpresas porque fuera de ese club quedan países como EEUU o Francia, que todos identificamos con progreso y libertad, al menos de buenas a primeras, sin entrar en el detalle.

España sí que supera el corte con 8,08 puntos y eso en sí es una buena noticia que pone en su sitio a aquellos que acusan fácilmente a nuestro país de antidemocrática, dictadura, etc, si bien todavía estamos lejos de países como Nueva Zelanda (9,26), Dinamarca (9,22), Irlanda (9,15), Canadá (9,15), Australia (9,09), Finlandia (9,03) o Suiza (9,03). De todas formas, como todo, estas cosas hay que tomarlas con precaución y como todos los estudios hay factores que no se sabe cómo se han ponderado o si realmente se han tenido en cuenta. Pensemos por ejemplo en el grado de corrupción en España a nivel de todos los niveles de la Administración o la tan controvertida ley electoral que PP y PSOE nunca han querido cambiar porque favorecía su continuidad en el poder. Quizás la situación real de nuestra democracia se encuentra en un punto intermedio, pero eso sí, en el pelotón de cabeza y muy lejos de dictaduras deleznables como la venezolana o la de Corea del Norte.