jueves, 15 de marzo de 2018

Stephen Hawking, unas estrella más en el firmamento



Ateo declarado, a lo largo de su carrera, Hawking, posiblemente el científico más conocido por el público después de Einstein, recibió muchos premios de prestigio, aunque ha muerto sin conseguir el Nobel. "Pese a la trascendencia de su investigación, algunos de sus modelos, teorías y conjeturas tardarán años en cotejarse de manera inequívoca con la realidad. Por esta razón, y considerando los criterios que se aplican habitualmente para la designación de los premios Nobel, no es de extrañar que no lo recibiera", argumenta Xavier Barcons.

"Quizás algún día tendremos evidencia directa de la existencia de horizontes de sucesos alrededor de agujeros negros, aunque el propio Hawking cuestionó la existencia de esas vallas de información alrededor de ellos. Cuando eso ocurra, nos acordaremos de él, aunque será demasiado tarde para el Nobel", añade el astrofísico español.

lunes, 5 de marzo de 2018

Los eSports?



Interesante entrevista en La Voz de Galicia a Fernando Piquer, director ejecutivo de Movistar Riders, sobre el fenómeno creciento de los deportes electrónicos o de videojuegos hablando en plata. Da que pensar. He aquí un extracto de la misma:

¿Qué dimensión tiene la afición a los deportes electrónicos?

-Así como los deportes tradicionales como el fútbol o el baloncesto se desarrollan en una cancha tradicional, hay gente que, en lugar de ver ese espectáculo, le gusta ver a otros jugadores jugar a videojuegos. La mecánica es igual que cuando ves un partido de fútbol, pero en este caso sigues competiciones de videojuegos en Internet. De unos años a esta parte se ha convertido en un fenómeno masivo y hay plataformas que albergan competiciones, como Twich o YouTube Gaming, que son seguidas por millones de espectadores en todo el mundo, especialmente chavales de la generación millennial. Se suma cada vez más gente y es algo que en los próximos años será mainstream.


-¿Cree que es exacta su clasificación como deporte?

-El debate de si es o no un deporte no es importante. Lo que es indiscutible es que es un fenómeno equiparable al del deporte como espectáculo audiovisual y de entretenimiento, porque se trata de gente que está viendo a jugadores con mucho talento jugar a algo, videojuegos en este caso. Y los que lo practican son chavales con habilidades para jugar a videojuegos de una manera que poca gente es capaz de hacerlo. Además, entrenan duramente para ser cada vez mejores, con afán de superación, juegan en equipo, se comunican, desarrollan estrategias... Discutir si esto es equiparable al fútbol, al baloncesto, al ajedrez o al tiro olímpico es una discusión que despista de lo realmente importante.

-¿Acaba esto con el mito del videojuego como una práctica pasiva y poco socializadora?

-A veces algunos padres se quejan de que su hijo adolescente está metido en la habitación, aislado y sin vida social. Yo les digo que miren lo que es un equipo de League of Legends. Probablemente su hijo esté jugando en equipo con otras cuatro personas a las que no conoce, hablando en un idioma que seguramente será el inglés, con compañeros que a lo mejor son un sueco, un noruego y un alemán, por ejemplo. Lo que está haciendo es desarrollar unas habilidades que le sirven como jugador y como reto de superación y compromiso. Si además llegas a ser un profesional tienes un trabajo físico diario en el gimnasio que es parte de la preparación, al igual que otros hábitos saludables para tener un rendimiento óptimo. No es muy distinto de cualquier otra actividad.

Leído el documento, se me ocurren algunas consideraciones sobre las que deberíamos reflexionar:

  1. Pero de verdad existe un debate sobre si esto es deporte o no?
  2. Es un fenómeno que engancha cada vez a más espectadores. Entiendo que los que juegan se lo pasen bien, pero los que ven como otros manejan unos muñecos virtuales... en serio, para hacérselo mirar.
  3. Es una forma de socializar? Bueno, creo que dista bastante de ello, pero al paso al que vamos socializar dentro de unos años también se considerará hablar con la mascota artificial, ahora llamada AI por sus siglas en inglés (artificial intelligence), podrás hablar con ella en diferentes idiomas y hasta te podrás considerar Dios porque hará lo que le digas.

Un ejemplo más de lo que las nuevas tecnologías están cada vez más presentes en nuestras vidas, pero la pregunta es si transforman nuestras vidas para mejor o no.